Cuando la noche acecha y no alcanzas a escuchar tu voz,
Cuando todos los bares cierran y sigue con sed tu reloj,
Cuando te miras en el espejo y no reconoces el reflejo en su interior...
Y escuchas en el silencio palabras mudas que hablan de vacios encerrados en cajas oscuras...
Y hoy me siento en el balcón de mi destino
A recordar que una vez alguien me dijo
Que lo bueno se transforma
Para ser más difícil de ver.
Hoy me conformaré con saber que existo...
En un comentario colgado en el viento
Que se agita cuando una mariposa bate sus alas.
Cuando las aceras llenas de miradas vacías se arrastran
Y las palabras se gastan, se amargan...
Cuando el abismo se ensancha y se separa el corazón de la garganta...
Cuando duermes despierto...
Cuando vuelas sin alas...
Y si la voz de la duda deja de ser la estrella invitada,
Y si no brota la música del alma...
Yo me conformaré con saber que existo;
Con recordar que una vez alguien me dijo
Que lo bueno vuela bajo
En el radar del querer...
Yo me sentaré en el balcón de mi destino...
Para intentar ver desde otro punto de vista que no consista en dejarme perder,
Rebuscar en las sombras el brillo de esa luna que ahora no alumbra.
No querer, simplemente saber.
Tan solo ser
Y si las sonrisas han huido
Dejando tras de sí tan solo el frio,
Y si el peso del alma no flota en un vaso vacio
O la suma de lo ganado no eclipsa lo perdido...
Me sentaré en el balcón de mi destino
Para comprobar que sigo vivo.
28 ene 2012
18 ene 2012
demasiada mierda
Voy conduciendo con el parabrisas mojado
a pesar de que fuera no llueve,
la ventanilla bajada para que vuelen las penas,
pero su peso ha cambiado, ya no se mueven.
Con cada nueva gota corro el riesgo de quedarme seco por dentro,
de no tener agua para que flote el alma.
Siempre me he repetido lo mismo, "autocompasión cero".
No puedo permitir que el miedo me tome como presa con el cebo del recuerdo,
pero no acierto.
Cuento, uno, y cierro los ojos como el ingenuo que pretende ponerle parches a una presa.
Dos, y un frio entumecedor de mi se apodera,
"no sigas caminando, no merece la pena"
me susurra y deja la puerta abierta
para que aquellos fantasmas griten de nuevo.
Tres, y sus ecos me llenan con recuerdos que son una condena.
Cuatro, y ya he perdido...
cinco y el macabro juego de nuevo empieza.16 ene 2012
Cassandra
Tú que caminas por la vida tejiendo sueños y desgranas las arenas del tiempo para analizar los recuerdos;
Tú que te cuelas en mis días y llenas de frases ricas en alegrías cada uno de sus momentos.
Tu que eres tú y por eso te quiero.
Tu que eres tú y por eso te llevo dentro.
Tu que eres tú y por eso nunca serás tan solo un recuerdo.
Tantas cosas dichas, tantas escritas que continuar esto me parece un reto, encontrar las palabras que describan todo lo que siente un alma cautiva es algo incierto.
Llevo tiempo rebuscando en mi cabeza en busca de una musa que se preste a cederme su ingenio, que me preste una brisa de su inspiración y convertir en realidad esto.
Soñadora compulsiva que viaja ligera de equipaje, tan solo una maleta, una sonrisa eterna y un camino por delante. Siempre rebuscando entre deseos para encontrar ese sentimiento que haga grandes a aquellos que su andar comparten, que su corazón tocan o que son apoyo constante.
¿Por qué una sonrisa tuya ilumina cualquiera de mis días? ¿Por qué tus palabras pesan más que las otras?
¿Por qué el sonido de tu voz amansa las fieras que pugnan por hacerse con mi interior? Ni yo mismo encuentro explicación certera a esta certeza, al menos ninguna que abarquen simples palabras. La palabra amistad se pierde de la mano de la palabra cariño en el cajón de los sinsentidos cuando quiero expresar los míos.
Tú que te cuelas en mis días y llenas de frases ricas en alegrías cada uno de sus momentos.
Tu que eres tú y por eso te quiero.
Tu que eres tú y por eso te llevo dentro.
Tu que eres tú y por eso nunca serás tan solo un recuerdo.
Tantas cosas dichas, tantas escritas que continuar esto me parece un reto, encontrar las palabras que describan todo lo que siente un alma cautiva es algo incierto.
Llevo tiempo rebuscando en mi cabeza en busca de una musa que se preste a cederme su ingenio, que me preste una brisa de su inspiración y convertir en realidad esto.
Soñadora compulsiva que viaja ligera de equipaje, tan solo una maleta, una sonrisa eterna y un camino por delante. Siempre rebuscando entre deseos para encontrar ese sentimiento que haga grandes a aquellos que su andar comparten, que su corazón tocan o que son apoyo constante.
¿Por qué una sonrisa tuya ilumina cualquiera de mis días? ¿Por qué tus palabras pesan más que las otras?
¿Por qué el sonido de tu voz amansa las fieras que pugnan por hacerse con mi interior? Ni yo mismo encuentro explicación certera a esta certeza, al menos ninguna que abarquen simples palabras. La palabra amistad se pierde de la mano de la palabra cariño en el cajón de los sinsentidos cuando quiero expresar los míos.
Cansado
Estoy cansado de vivir asi,
de no saber hacerlo de otra manera
y asomar fuera del caparazón solo la nariz
en las ocasiones que lo requieran.
Estoy cansado de no saber vivir de otra manera
que no sea entregando el corazón a un bosque en tinieblas
confiando en que la ilusion sea el faro entre la niebla.
Aprendí a llorar y me ayudaron a reír...
pero el tiempo me enseñó a valorar la realidad.
Y ahora estoy arto de caminar y revivir,
de planear y persistir!
Insistí en una forma de vivir que hacia aguas,
y aguantas hasta que te cansas.
En una tormenta todo son olas, lo malo no es verlas, si no imaginarlas.
de no saber hacerlo de otra manera
y asomar fuera del caparazón solo la nariz
en las ocasiones que lo requieran.
Estoy cansado de no saber vivir de otra manera
que no sea entregando el corazón a un bosque en tinieblas
confiando en que la ilusion sea el faro entre la niebla.
Aprendí a llorar y me ayudaron a reír...
pero el tiempo me enseñó a valorar la realidad.
Y ahora estoy arto de caminar y revivir,
de planear y persistir!
Insistí en una forma de vivir que hacia aguas,
y aguantas hasta que te cansas.
En una tormenta todo son olas, lo malo no es verlas, si no imaginarlas.
El problema de ser yo
El problema de ser yo soy yo. El problema es lo que siento, o tal vez como lo siento. Tal vez el problema sea que no me entiendo. El problema es a veces un recuerdo, o la forma de entenderlo.
El problema es lo que pierdo en cada intento, o lo que creo que pierdo. El problema es, o puede ser, como veo la vida, lo simple que me resultan algunas cosas y lo complicado que parecen a los ojos de los demás. Quizás mi manera de actuar no sea la correcta, y ese sea el problema.
Los amigos son un tesoro en mi vida, un pilar con el que todo es más fácil. Y tal vez el problema es el significado que le otorgo a esa palabra. Pero la amistad es mi aire, es ese oxigeno tan necesario y tan escaso a la vez. Y lo doy todo. Quizás ahí esté el problema, el exceso nunca fue bueno.
Nunca fui nadie, o quizás siempre fui nadie, el problema no es que no me crea nadie, que tampoco, el problema es que nunca lo he sentido así. Quiero decir, realmente nunca lo he sentido, no recuerdo esa sensación de ser importante, si querido, al menos eso creo, tal vez incluso valorado en alguna ocasión.
Con todo esto no quiero que nadie se compadezca, no me gusta, nunca me ha gustado, dar pena porque considero que la pena solo produce reacciones sinceras, pero pasajeras. Puede que ese sea el problema, el hecho de que todo en esta vida sea así de pasajero, o que ciertas carencias sangran más cuando regresan después de ser cubiertas durante algún tiempo.
Y ese tiempo es lo más maravilloso, lo más precioso que he sentido nunca y es otra posibilidad, la adicción a esa sensación puede ser el verdadero problema. Tal vez solo sea autoestima, quizás todo sea cuestión de mi cabeza, problema de no mirar bien o darle más valor a las cosas de las que debiera por mi salud mental. Quizás la única manera de no decepcionarse sea volver a vivir con lo justo y no esperar nada.
O puede que no haya problema, que sea un absurdo reflejo de lo que me creo, que me preocupe por tonterías, aunque el problema es que a mí no me lo parecen. El problema es que no me encuentro en las miradas que antes no tenía. El problema es que no estaba acostumbrado a ello y me da miedo no acostumbrarme a no tenerlo. El problema es que me habéis enseñado tantas cosas buenas que ahora lo necesito.
Ese puede ser el problema
15 ene 2012
Amistad
Rebuscando en el baúl de los recuerdos inhalé el aroma de un sentimiento
que ocupo al completo mi pensamiento.
Comenzaba a creer que una ilusión era la amistad verdadera
y en verdad
comencé a creer que se convertiría en utopía el tenerla.
Pero tu giraste mi timón y aprendiste su luz en mi corazón,
dejaste que entrara en mi su calor,
convertiste lo triste canción.
Me llenaste de ti,
y acepte el honor de que vivieras en mi (sabia que me ayudarías a seguir).
Sobran las palabras,
lees entre mis líneas,
hablan tus miradas y
sanan mis heridas,
me reconozco en tu alma y la mía se nutre de tus sonrisas.
que ocupo al completo mi pensamiento.
Comenzaba a creer que una ilusión era la amistad verdadera
y en verdad
comencé a creer que se convertiría en utopía el tenerla.
Pero tu giraste mi timón y aprendiste su luz en mi corazón,
dejaste que entrara en mi su calor,
convertiste lo triste canción.
Me llenaste de ti,
y acepte el honor de que vivieras en mi (sabia que me ayudarías a seguir).
Sobran las palabras,
lees entre mis líneas,
hablan tus miradas y
sanan mis heridas,
me reconozco en tu alma y la mía se nutre de tus sonrisas.
El 15M que llevo dentro
Tal vez (es asombroso la cantidad de veces que podemos utilizar estas dos palabras) nunca hayamos hecho una profunda reflexión sobre lo que empuja nuestros corazones a acudir a una asamblea, participar en acciones o simplemente a difundir o hacernos eco de una convocatoria de ese gran sentimiento que es el 15M. Tal vez (ahí están de nuevo) eso solo suceda en mi caso. ¿Por qué no lo había hecho antes? Quién sabe, pereza, falta de tiempo, o de ganas. Lo cierto es que esta manera de pensar que es el 15M reabre puertas a sentimientos que desgraciadamente estaban relegados a un segundo plano en una sociedad marcada por el materialismo y el deseo de más. Todos tenemos claro que las cosas están mal, vivimos en una democracia herida de muerte por los cuchillos del poder, atados de pies y manos con cadenas que nos ataban por separado. Y lo grande que reside en nuestros corazones nos llevó a juntarnos, a abandonar esos cientos de miles de pequeños aspectos que nos separaban para gritar que tus problemas son los míos y los de aquel que antes ni mirabas pero aun así hoy está dispuesto a luchar a tu lado. Está más que claro, somos uno frente a aquellos que se empeñan en separarnos porque no somos animales solitarios. Buscamos durante toda nuestra vida vivir en sociedad, rodearnos de esos momentos en grupo que siempre nos han hecho más fuertes, porque uno solo nunca ha representado fortaleza y tenemos una cosa clara: mi fuerza es la de mi compañero.
Algo así (tal vez otras palabras hubieran sido más correctas o adecuadas, pero son las elegidas por mi) despertó en mi el 15M. Una admiración hacia el sentido común. Días después me acerqué a la plaza de mi ciudad para comprobar, y asombrarme, que distinta gente superaba diferencias para luchar por lo mismo. Tardé un par de días más en atreverme a hablar con una de las acampadas (nunca me ha sobrado valor), pero tras una breve charla el afán por compartir me hacia esperar impaciente el momento de poder ayudar a esa gente que seguramente se habría cruzado en mi camino más de una vez y sin embargo nunca los había "visto" de verdad. El funcionamiento era increíblemente sencillo, una idea y como mano de obra dos manos, y otras dos, y dos mas...y es que las discusiones solo deberían ser concebidas desde la constructividad, no desde el afán de resaltar. Nunca he estado tan rodeado de buena gente, cosa muy importante. Y con eso de buena gente no me refiero a esa con la que te vas de cafés o de fiesta. No, me refiero a gente de verdad, esas personas que se esposan a tu corazón sin condición. Y ese es mi aire, esa era la gasolina de un autobús que viaja vacío. Pero que un buen día se lleno de voces tan maravillosas que por mucho que juren que las trompetas del cielo suenan a gloria yo me quedo con el sonido de las voces de esa gente.
El camino es largo, muchos los obstáculos. Pero todo es posible si no es uno solo el que camina.
Algo así (tal vez otras palabras hubieran sido más correctas o adecuadas, pero son las elegidas por mi) despertó en mi el 15M. Una admiración hacia el sentido común. Días después me acerqué a la plaza de mi ciudad para comprobar, y asombrarme, que distinta gente superaba diferencias para luchar por lo mismo. Tardé un par de días más en atreverme a hablar con una de las acampadas (nunca me ha sobrado valor), pero tras una breve charla el afán por compartir me hacia esperar impaciente el momento de poder ayudar a esa gente que seguramente se habría cruzado en mi camino más de una vez y sin embargo nunca los había "visto" de verdad. El funcionamiento era increíblemente sencillo, una idea y como mano de obra dos manos, y otras dos, y dos mas...y es que las discusiones solo deberían ser concebidas desde la constructividad, no desde el afán de resaltar. Nunca he estado tan rodeado de buena gente, cosa muy importante. Y con eso de buena gente no me refiero a esa con la que te vas de cafés o de fiesta. No, me refiero a gente de verdad, esas personas que se esposan a tu corazón sin condición. Y ese es mi aire, esa era la gasolina de un autobús que viaja vacío. Pero que un buen día se lleno de voces tan maravillosas que por mucho que juren que las trompetas del cielo suenan a gloria yo me quedo con el sonido de las voces de esa gente.
El camino es largo, muchos los obstáculos. Pero todo es posible si no es uno solo el que camina.
14 ene 2012
Un momento
Que tendrá un momento
que desata reacciones en cadena;
que tendrá que desangra las venas y desarma la calma
y es capaz de marcar a fuego con su aliento esa flecha
que vuela en el desvelo.
Que tendrás, momento,
que tu olor embarga y tu voz es deseo;
que tendrás que siendo no más que un beso
te encajas en el alma
escondido tras cajas de recuerdos.
¿y si fueras tiempo?
bailarías entre días a la sombra de las horas;
te bastaría un segundo para hacerte eterno
¿y si fueras sincero?
abrirías todas las puertas cerradas por el antojo
enseñando maravillas y no despojos
de retales en envidia en remojo
¿y si fueras incierto?
reclamarías un puesto que tal vez no fuera tuyo
y construirías pilares mudos
decorados con capas de disimulo
Capaz de serlo todo y arder como el fuego
O espantar ilusiones convirtiéndolas en opciones sin peso.
que desata reacciones en cadena;
que tendrá que desangra las venas y desarma la calma
y es capaz de marcar a fuego con su aliento esa flecha
que vuela en el desvelo.
Que tendrás, momento,
que tu olor embarga y tu voz es deseo;
que tendrás que siendo no más que un beso
te encajas en el alma
escondido tras cajas de recuerdos.
¿y si fueras tiempo?
bailarías entre días a la sombra de las horas;
te bastaría un segundo para hacerte eterno
¿y si fueras sincero?
abrirías todas las puertas cerradas por el antojo
enseñando maravillas y no despojos
de retales en envidia en remojo
¿y si fueras incierto?
reclamarías un puesto que tal vez no fuera tuyo
y construirías pilares mudos
decorados con capas de disimulo
Capaz de serlo todo y arder como el fuego
O espantar ilusiones convirtiéndolas en opciones sin peso.
Mi musa
...Y lo que te querría...
Cambiaría una vida llena de gozo y placer por ser un recuerdo en el pozo de tu alma y crecer en el. Con palabras gastadas llenaría cien de mis días con tal de encontrarte en la cercanía y en ti ver una ilusión nacer.
...Y lo que te querría...
Disdfrutaría con cada silencio de tu mirada, con cada aleteo del viento en tus pestañas... moriría de alegría incluso en un infierno en llamas por ver en tus ojos un nuevo amanecer.
...Y lo que te querría...
Besaría cada una de esas sonrisas encantadas que me encandilan y acariciaría tus sueños. Desearía que tus labios tatuaran mi piel con cada beso para notar ese fuego intenso que desata mis fantasías...
Pero las musas vienen y van, como las olas que el mar arrastra hasta la orilla y desaparecen tras la tempestad.
Cambiaría una vida llena de gozo y placer por ser un recuerdo en el pozo de tu alma y crecer en el. Con palabras gastadas llenaría cien de mis días con tal de encontrarte en la cercanía y en ti ver una ilusión nacer.
...Y lo que te querría...
Disdfrutaría con cada silencio de tu mirada, con cada aleteo del viento en tus pestañas... moriría de alegría incluso en un infierno en llamas por ver en tus ojos un nuevo amanecer.
...Y lo que te querría...
Besaría cada una de esas sonrisas encantadas que me encandilan y acariciaría tus sueños. Desearía que tus labios tatuaran mi piel con cada beso para notar ese fuego intenso que desata mis fantasías...
Pero las musas vienen y van, como las olas que el mar arrastra hasta la orilla y desaparecen tras la tempestad.
Mátame a recuerdos...hoy quiero emborracharme de silencio y que sienta mi alma el peso que lastra mi mirada.
Que claven de mi ataúd la tapa con puñados de clavos de deseo,
quiero morir entre palabras para pasar la eternidad en busca de las adecuadas.
Todas las canciones suenan así,
como si no hubiera melodía que las atara a una forma de existir
que merma las ganas.
Como si ya nada fuera digno de latir entre telarañas de tiempo.
Como si no hubiera manera de separar lo arrugado de lo terso.
Versos al alba que se transforman en palomas
intentando volar con un ala atada,
pero cuando remonta el vuelo este sueño ya no queda madrugada.
Que claven de mi ataúd la tapa con puñados de clavos de deseo,
quiero morir entre palabras para pasar la eternidad en busca de las adecuadas.
Todas las canciones suenan así,
como si no hubiera melodía que las atara a una forma de existir
que merma las ganas.
Como si ya nada fuera digno de latir entre telarañas de tiempo.
Como si no hubiera manera de separar lo arrugado de lo terso.
Versos al alba que se transforman en palomas
intentando volar con un ala atada,
pero cuando remonta el vuelo este sueño ya no queda madrugada.
Hoy divago
Hoy divago sobre un papel en blanco dejando volar libre mi alma lejos de una cárcel de miradas atrapadas en un desahucio de un barco abandonado.
Hoy me arrastro por ese mar en el que las palabras se aparean para dar a luz frases que tal vez de sentido carezcan para aquel que no las sienta.
Nacemos a oscuras y esa oscuridad nos acompaña el resto de nuestra vida, escondiéndose en recovecos siniestros, disimulándose en paisajes inciertos entre edificios de cemento que atosigan la realidad. De repente alguien embiste el silencio que acompaña las sombras y destroza los cimientos que tanto nos ha costado levantar, se tambalean los comienzos antes incluso de saber si habrá final. Se desatan miles de luciérnagas que revolotean a nuestro alrededor, fieles defensores de la luz de un corazón, valientes guerreros que no prestan atención a la desazón y bailan aquí y allá, danzan agujereando la oscuridad hasta que el cielo comienza a aparecer detrás.
Ilusión es la primera en alegrarse, ella siempre acompañada de Esperanza se derrama al trasluz, inquietas y palpitantes corren, Ilusión es consciente de que apremia el tiempo cuando quien te persigue es Temor. Un segundo más adelante no pierden el tiempo en la esquina del reloj, llegan tarde. Es una carrera constante en la que de nada vale esperar a Razón, andará borracha en la barra de un bar con su amiga Compasión llenando un nuevo vaso, vaciando la botella de una realidad cuyo primer trago ya fue amargo.
Pero nacemos a oscuras...la oscuridad es algo innato en nuestros pasos. Mientras la luz juega a calentar la tierra que pisamos la oscuridad nos pone en nuestro lugar, nos recuerda, una y otra vez, que somos humanos. Que vivimos de prestado. Que vengo a este mundo solo, que solitarios serán mis pasos....que todo lo demás son añadidos que solo aguantan el camino por simples retrasos.
8 ene 2012
La Luna y el Sol
Una noche Andrea estaba sentada sobre las rodillas de su madre que se mecía adelante y atrás arrancándole a la vieja mecedora unos soniditos similares a los que los grillos hacían al otro lado de su ventana cada vez que el sol comenzaba a ocultarse. El sube viento que soplaba, cálido como lo eran por aquella época del año, hacia que el mechón de pelo rubio que le colgaba sobre la frente bailara revoltoso.
- ¿Por que sale cada noche la Luna mama? –le preguntó la pequeña sin apartar sus azules ojos de la oscuridad del cielo- parece muy sola ahí arriba.
- Porque nos quiere mucho cariño. Un día le prometió al sol que iluminaría nuestro camino para que el pudiera descansar de esa agotadora tarea al menos durante unas horas cada día. De esa promesa nacieron las noches.
- Entonces... ¿Por qué hay noches en las que no la veo brillar? ¿Se pierden las personas en esas noches tan oscuras? –la mirada de Andrea se había clavado en los ojos de su madre con una pizca de incertidumbre y otra de miedo.
- La Luna nos quiere mucho, tanto como yo a ti –le dijo acariciándole la cabeza suavemente con la palma de la mano, intentando domar el remolino de su coronilla -, pero sabe que no puede guiarnos eternamente. Sabe que si de vez en cuando no nos deja caminar solos en la oscuridad no aprenderíamos a valernos por nosotros mismo. Por eso a veces se esconde, para enseñarnos que somos capaces de elegir solos nuestro camino.
- ¿Por que sale cada noche la Luna mama? –le preguntó la pequeña sin apartar sus azules ojos de la oscuridad del cielo- parece muy sola ahí arriba.
- Porque nos quiere mucho cariño. Un día le prometió al sol que iluminaría nuestro camino para que el pudiera descansar de esa agotadora tarea al menos durante unas horas cada día. De esa promesa nacieron las noches.
- Entonces... ¿Por qué hay noches en las que no la veo brillar? ¿Se pierden las personas en esas noches tan oscuras? –la mirada de Andrea se había clavado en los ojos de su madre con una pizca de incertidumbre y otra de miedo.
- La Luna nos quiere mucho, tanto como yo a ti –le dijo acariciándole la cabeza suavemente con la palma de la mano, intentando domar el remolino de su coronilla -, pero sabe que no puede guiarnos eternamente. Sabe que si de vez en cuando no nos deja caminar solos en la oscuridad no aprenderíamos a valernos por nosotros mismo. Por eso a veces se esconde, para enseñarnos que somos capaces de elegir solos nuestro camino.
7 ene 2012
Pedacitos de mi
Cuando presiento un cambio me encierro a oscuras en mi mente para intentar salvar todo lo necesario antes de que el tiempo pueda hincarle el diente sin reparo.
Cuando sueño con un legado imagino a un niño, sobre las rodillas de su padre sentado y preguntándole por el pasado, rogándole que le cuente aquella vieja historia que tantas veces le ha contado.
Pero que importa el pasado si el presente es un regalo, si es una página en blanco que la vida nos entrega cada día para que pintemos, para que finjamos que sabemos lo que queremos o que valoramos lo que encontramos.
Esa es la salida cuando una mente confusa confunde y confiesa que el mundo la aturde, cuando un sorbo de vida se paga con una sonrisa, cuando un gramo de aliento se consume sin quererlo.
Esa es mi droga más dura, escribir sobre lo que siento, y siento que vuelo cada vez que aprendo a desanudar sentimientos complejos.
Esa es mi tortura, intentar escribir las palabras justas que colgadas en el viendo viajen con ternura de momento en momento hasta llegar al lugar donde las historias perduran, ese lugar en el que se crean los besos sinceros.
Esa es mi locura, pues por mucho que escriba creo que nunca estaré satisfecho...soy como el loco que intenta abarcar con sus cortos brazos el inmenso cielo.
Cuando sueño con un legado imagino a un niño, sobre las rodillas de su padre sentado y preguntándole por el pasado, rogándole que le cuente aquella vieja historia que tantas veces le ha contado.
Pero que importa el pasado si el presente es un regalo, si es una página en blanco que la vida nos entrega cada día para que pintemos, para que finjamos que sabemos lo que queremos o que valoramos lo que encontramos.
Esa es la salida cuando una mente confusa confunde y confiesa que el mundo la aturde, cuando un sorbo de vida se paga con una sonrisa, cuando un gramo de aliento se consume sin quererlo.
Esa es mi droga más dura, escribir sobre lo que siento, y siento que vuelo cada vez que aprendo a desanudar sentimientos complejos.
Esa es mi tortura, intentar escribir las palabras justas que colgadas en el viendo viajen con ternura de momento en momento hasta llegar al lugar donde las historias perduran, ese lugar en el que se crean los besos sinceros.
Esa es mi locura, pues por mucho que escriba creo que nunca estaré satisfecho...soy como el loco que intenta abarcar con sus cortos brazos el inmenso cielo.
5 ene 2012
Canción de Luna (El viaje de Azael)
gracias a las dos dogfluts que consiguieron que esto se hiciera realidad.
Un trocito del próximo capitulo de Azael (todavía sin nombre). una canción que Azael escuchará en una taberna.
Naci entre nubes negras
pero conseguí convencer a la Luna de que me entregara la cordura de su locura
con unas pocas palabras.
Los que hablan de ella cuentan que ha perdido su brillo,
que la notan apagada;
incluso algunos la difaman
al afirmar que ya no encuentra su sitio en la belleza de una noche estrellada.
Todas ellas son palabras sin sentido alejadas de la realidad,
de la verdad a la que esta melodía os ha de arrastrar
si encontráis un sitio y estáis dispuestos a escuchar.
Prestad atención pues a continuación oiréis
como una ilusión se hace realidad
con un poco de pasión
y os sentiréis estremecer.
Todos pensareis que la Luna es inalcanzable,
y todos os equivocareis pues aunque mucha distancia nos separe de ella
es posible acariciar a la dama más bella.
Una noche oscura,
tan negro era aquel momento que apenas alcanzaban mis manos la vista,
apareció en lo alto del cielo la Luna.
Su brillo baño mi ser,
mi mirada se perdió en el camino que me separaba de algo tan divino
que irreal podría parecer
pero que despertó en mi todos los sentidos.
Comprendí que mía la tenía que hacer,
que mi vida era un vaso vacio mientras no la pudiera conocer,
mientras no pudiera contar con ella en mi destino,
mientras no pudiera de su belleza beber.
Y me puse a hablar,
canté versos tan maravillosos que no los recuerdo
y que dudo pudiera volver a cantar
pues nacieron del rincón donde se guardan los besos.
Ella se conmovió,
un rayo de su blanca luz rozó el suelo, me deslumbró
y me dejó frio como el hielo
cuando la vi danzar a mí alrededor.
Su pelo dorado reflejaba los cientos de versos
que sin duda los poetas le habían recitado,
su mirada acallaba el silencio hasta reducirlo a un inservible objeto.
Y sonrió,
y esa risa provocó en mí un delirio de alegría que me llevó a entregarle mi corazón.
La luna me había entregado su cordura en forma de dama desnuda
y yo perdí la razón.
No es que brille menos desde ese día,
es que brilla sin el fulgor con el que inundo mi vida
al aceptar mi canción,
al convertirse en mi guía y entregarme cada noche con toda intención
de hacer más llevaderos los días
durante los que permanece escondida por miedo al rencor del sol.
Un trocito del próximo capitulo de Azael (todavía sin nombre). una canción que Azael escuchará en una taberna.
Naci entre nubes negras
pero conseguí convencer a la Luna de que me entregara la cordura de su locura
con unas pocas palabras.
Los que hablan de ella cuentan que ha perdido su brillo,
que la notan apagada;
incluso algunos la difaman
al afirmar que ya no encuentra su sitio en la belleza de una noche estrellada.
Todas ellas son palabras sin sentido alejadas de la realidad,
de la verdad a la que esta melodía os ha de arrastrar
si encontráis un sitio y estáis dispuestos a escuchar.
Prestad atención pues a continuación oiréis
como una ilusión se hace realidad
con un poco de pasión
y os sentiréis estremecer.
Todos pensareis que la Luna es inalcanzable,
y todos os equivocareis pues aunque mucha distancia nos separe de ella
es posible acariciar a la dama más bella.
Una noche oscura,
tan negro era aquel momento que apenas alcanzaban mis manos la vista,
apareció en lo alto del cielo la Luna.
Su brillo baño mi ser,
mi mirada se perdió en el camino que me separaba de algo tan divino
que irreal podría parecer
pero que despertó en mi todos los sentidos.
Comprendí que mía la tenía que hacer,
que mi vida era un vaso vacio mientras no la pudiera conocer,
mientras no pudiera contar con ella en mi destino,
mientras no pudiera de su belleza beber.
Y me puse a hablar,
canté versos tan maravillosos que no los recuerdo
y que dudo pudiera volver a cantar
pues nacieron del rincón donde se guardan los besos.
Ella se conmovió,
un rayo de su blanca luz rozó el suelo, me deslumbró
y me dejó frio como el hielo
cuando la vi danzar a mí alrededor.
Su pelo dorado reflejaba los cientos de versos
que sin duda los poetas le habían recitado,
su mirada acallaba el silencio hasta reducirlo a un inservible objeto.
Y sonrió,
y esa risa provocó en mí un delirio de alegría que me llevó a entregarle mi corazón.
La luna me había entregado su cordura en forma de dama desnuda
y yo perdí la razón.
No es que brille menos desde ese día,
es que brilla sin el fulgor con el que inundo mi vida
al aceptar mi canción,
al convertirse en mi guía y entregarme cada noche con toda intención
de hacer más llevaderos los días
durante los que permanece escondida por miedo al rencor del sol.
3 ene 2012
Principios
Cuando el frio de la noche erice mi cuerpo haciendo que mis sentidos se tensen
cual cuerdas de violín, no permitiré que el miedo obtenga ninguna nota de mí.
Cuando el sol mengue hasta ser una canica, y la noche se abalance sobre él a sabiendas de su victoria no acamparé entre la maleza que trepa sin importar quien pierda.
Cuando el sonido del afilar de la guadaña de la muerte corte el silencio como lo hace su hoja con las vidas a medio vivir mi alma cantará hasta desgarrarse para ocultar su lenta letanía.
No permitiré que la apatía me arrastre hacia la oscuridad de las sombras mientras me quede un aliento para luchar por disfrutar de mi tiempo ni cerraré mi puerta al viento que se acerque como una brisa.
No tendré prisa en apreciar cada silencio cuando este sea propicio y no traicionero ni en mi camino hacia un destino en el que no creo.
No dudare en darte el cielo si vienes con los pies en el suelo, se lo que entrego.
Cuando me agiten traiciones lucharé por permanecer en pie pese a los golpes que me propine el tiempo y procuraré que mi alma meza un dulce recuerdo cada anochecer.
procuraré querer con el corazón mas que con los ojos, ver más allá de un simple enojo que enmascara futuras lágrimas y sollozos.
Trataré con respeto y elegancia a caballeros y a damas siempre que ellos me midan por el mismo rasero.
Viviré lo mejor que pueda siempre que ello no requiera vivir por encima de nadie.
cual cuerdas de violín, no permitiré que el miedo obtenga ninguna nota de mí.
Cuando el sol mengue hasta ser una canica, y la noche se abalance sobre él a sabiendas de su victoria no acamparé entre la maleza que trepa sin importar quien pierda.
Cuando el sonido del afilar de la guadaña de la muerte corte el silencio como lo hace su hoja con las vidas a medio vivir mi alma cantará hasta desgarrarse para ocultar su lenta letanía.
No permitiré que la apatía me arrastre hacia la oscuridad de las sombras mientras me quede un aliento para luchar por disfrutar de mi tiempo ni cerraré mi puerta al viento que se acerque como una brisa.
No tendré prisa en apreciar cada silencio cuando este sea propicio y no traicionero ni en mi camino hacia un destino en el que no creo.
No dudare en darte el cielo si vienes con los pies en el suelo, se lo que entrego.
Cuando me agiten traiciones lucharé por permanecer en pie pese a los golpes que me propine el tiempo y procuraré que mi alma meza un dulce recuerdo cada anochecer.
procuraré querer con el corazón mas que con los ojos, ver más allá de un simple enojo que enmascara futuras lágrimas y sollozos.
Trataré con respeto y elegancia a caballeros y a damas siempre que ellos me midan por el mismo rasero.
Viviré lo mejor que pueda siempre que ello no requiera vivir por encima de nadie.
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